SmackDown 233 desde Chicago, Illinois.

Pain: Primero que nada, no vengo a aguaros la fiesta. Soy un tipo que sabe aceptar las derrotas y solo venía aquí a felicitaros. En SummerSlam prometí 2 cosas y fallé en una de ellas. Por una parte, prometí que junto a Hump daríamos el mayor espectáculo posible, que nadie se arrepentiría de ver el combate en parejas porque sería la mejor lucha de la noche y así fue. Puedo decir alto y claro que estoy muy orgulloso de Hump y de lo que juntos conseguimos. Revivimos una división que estaba muerta, defendimos ante grandes parejas, tuvimos una de las mejores rivalidades del año y fuimos campeones por más de 100 días. Encima todo empezó de forma muy bonita, en WrestleMania, y terminó de forma grandiosa, en un TLC Match en SummerSlam.



Pain: Sinceramente, poco más se puede pedir a un reinado. Fallamos en nuestro objetivo de lograr 10 defensas consecutivas, pero la vida da segundas oportunidades y pronto podremos redimirnos. Aún así, no me quiero olvidar de daros las gracias por ayudarnos a dar ese tremendo combate de SummerSlam. Demostraron que tiene el nivel suficiente como para estar en lo más alto y cuando os felicito, de verdad que lo hago de forma sincera.



Pain: Y ahora me vais a tener que perdonar. Sé que dije que solo venía a felicitaros, pero a veces la memoria me falla y la verdad es que si que tengo algo más que deciros. Y es que en Extreme Rules, Black Sabbath y The Brotherhood se verán las caras de nuevo y esta vez seréis vosotros los encargados de elegir estipulación, así que ya podéis empezar a pensar de que forma queréis que recuperemos lo que es nuestro.}



Pain: Porque yo no soy ningún chupa pollas que venga ahora a rendiros pleitesía. Todas estas palabras bonitas están muy bien, pero no hay nadie más competitivo que yo, y en Extreme Rules vais a ver de lo que puedo ser capaz. Probablemente hayáis oído hablar de la leyenda del guerrero legendario, la leyenda del Super Wrestler, y si no la conocéis, yo os la descubro.



Pain: Existe una leyenda que dice que cada 100 años nace un Super Wrestler Legendario, el cual tiene muchísimo más poder que cualquier wrestler normal, pero este poder solo surge cuando se sufre una pérdida de un ser querido o de un objeto muy valioso, y todos sus rivales acaban rindiéndose ante tal poder, pidiendo clemencia para que su carrera no termine, pero este ser es tan poderoso que aunque quisiera perdonar a sus rivales, no puede controlar tanto poder y termina por destruirlos y provocándoles lesiones irreversibles. Y ahora mismo muchos pensaréis que menuda fumada llevo encima, que estas historias solo sirven para locos y niños pequeños. Pero yo no estaría tan seguro.



Pain: Todos pensamos que los demonios son cosas que pertenecen a las leyendas y a nuestras pesadillas, pero hemos podido ver con vosotros tres que las cosas sobrenaturales no son solo ciencia ficción y que también ocurren en el mundo real, y tras SummerSlam sentí despertar dentro de mi un poder que jamás había sentido antes. Perder los campeonatos por parejas me dolió lo mismo que una puñalada en el pecho, pero una vez entré al vestuario, la ira pudo conmigo, destruí todo el camerino y Hump tuvo que salirse para no resultar herido, y eso me hizo creer que la leyenda del Super Wrestler Legendario puede ser cierta, que ese cuento que me contaron de niño no era falso y que la persona que me lo contó lo hizo por algo pero no me había dado cuenta hasta la pasada noche, y es que ese Super Wrestler Legendario soy yo, Pain, The Demon, y aunque estoy logrando retener ese poder para no hacer nada de lo que pueda arrepentirme, no creo que en Extreme Rules pueda contener tanta ira, así que Mappy y Dark, elegid bien porque quizás os quede menos de un mes de carrera profesional.